Después, la erradicación a la búsqueda de un lugar mejor para vivir, a la búsqueda de una tierra más amable y poder ser dueños de un terruño anhelo casi inmemorial de todos los campesinos. Y al final del camino un sabor un tanto amargo, otra puñalada: aquello que en Europa les había negado, las fértiles tierras se convirtieron en muchas otras dificultades que obstaculizaron su arraigo a la nueva comarca: tormentas, granizos, inundaciones, heladas, langostas, arriendos, etc. etc.JOSÉ LUIS GAUNA